Capítulo 04

Principales recomendaciones.


4.1.1. Tener claro el objetivo profesional.

Ésta es una condición necesaria no sólo para hacer frente a una entrevista de selección, sino para afrontar todo el proceso de búsqueda de trabajo. Si no se tiene claro qué se quiere conseguir, difícilmente se recorrerá el camino necesario para alcanzarlo.

4.1.2. Haber hecho un profundo balance sobre el grado de ajuste del propio perfil al del puesto del trabajo que se ofrece.

La mejor manera de generar confianza y seguridad en la persona que entrevista es transmitiendo un balance claro y creíble de las ventajas y desventajas del propio perfil para responder a los requisitos del puesto que se ofrece. Para hacerlo, es necesario antes haber hecho una profunda y sincera reflexión sobre las principales virtudes y los principales defectos de uno mismo.

4.1.3. Informarse sobre la empresa.

Ante dos candidaturas igualmente válidas para un puesto de trabajo, la empresa preferirá aquélla que muestre un especial interés por la organización. Una de las maneras más evidentes de mostrar este interés es estar suficientemente informado, o sea, conocer sus productos y/o servicios, los clientes, la competencia, el sector, etc.

4.1.4. Informarse sobre los detalles de la entrevista.

Cuanta más información se tiene de la entrevista, más fácil es controlar la ansiedad y los nervios. Por tanto, es recomendable informarse con tiempo y al máximo de los detalles de la entrevista para prepararla: dónde tendrá lugar, la persona que la hará, la información sobre el puesto de trabajo que se ofrece, la hora de la convocatoria, etc.

Estos detalles, entre otras cosas, tienen que permitir asegurar que se llega con puntualidad a la entrevista.

4.1.5. Preparar las respuestas a las preguntas más habituales, más conflictivas y más comprometidas.

Antes de ir a una entrevista es recomendable prepararse las respuestas a aquellas preguntas que hacen habitualmente, prever las más conflictivas atendiendo a la información del currículum y prever también las respuestas a posibles preguntas conflictivas de carácter más personal.

Sin embargo, hay que tener cuidado de que al prepararse las respuestas no se pierda ni la naturalidad ni la sinceridad. Es necesario evitar hablar como si se hubiese memorizado aquello que se dice, así como dar información falsa.

4.1.6. Preparar preguntas para hacer.

Es muy habitual que al final de toda la entrevista, el entrevistador/a pida al candidato/a si quiere hacer alguna pregunta para aclarar cualquier duda. En estos momentos es importante aclarar cuál es el siguiente paso del proceso de selección y quién lo debe hacer. También se recomienda que, en una primera entrevista, se evite preguntar detalles sobre la retribución o las condiciones laborales. Estas preguntas es preferible hacerlas cuando el proceso de selección está más cerrado y las probabilidades de contratación son elevadas.

4.2.1. Destacar las partes positivas de las empresas en que se ha trabajado.

Si se habla bien de las empresas es posible que se valore la capacidad del candidato/a de establecer relaciones positivas. De todas maneras, esta recomendación es muy importante tenerla presente sobre todo para evitar hacer lo contrario, o sea, criticar o destacar aspectos negativos de las empresas en las que se ha trabajado.

4.2.2. Hacer saber los puntos fuertes que sugiere trabajar en esta empresa.

Al hacerlo, se demuestra tener información sobre la empresa y haber hecho un balance positivo. Tanto una cosa como la otra, indica que se tiene interés por la empresa, no sólo por el trabajo que ésta ofrece.

4.2.3. Dejar claro el motivo que empuja al cambio.

En caso de presentarse a un proceso de selección a pesar de estar trabajando, es muy importante explicar el motivo que empuja al cambio. En este caso sería fácil caer en la crítica de la empresa en que se está trabajando y, ya se ha comentado, que es del todo recomendable no hacerlo. Es deseable exponer el motivo de forma positiva. Por tanto, es necesario ser sincero/a a la hora de exponer la razón, pero no es necesario explicar toda la verdad.

4.2.4. Saber escuchar.

En una entrevista se puede caer en el error de aprovechar todos los momentos para hablar con la única finalidad de venderse. A pesar de esto, es muy importante hablar lo necesario y dedicar una especial atención a escuchar a la persona que conduce la entrevista.

4.3.1. Hablar mal de las empresas en las que se ha trabajado en el pasado.

Éste es uno de los peores errores que se pueden cometer en una entrevista, ver a una persona criticar a una empresa en que ha estado trabajando puede pensar que, si se la contrata, se comporte de forma similar con la empresa que ahora ofrece el puesto de trabajo. Una persona que es capaz de dar mala prensa de otras empresas es una amenaza para la empresa contratante.

4.3.2. Centrarse, de entrada, en la retribución.

En una primera entrevista en que las probabilidades de acceso al puesto de trabajo no son claras, es preferible no centrarse en hablar de la retribución ni en detalles de las condiciones laborales. Quién lo hace, muestra un interés muy instrumental por el trabajo y resta importancia a otros beneficios que pueda ofrecer la organización.

4.3.3. Decir que la intención es trabajar en esta empresa hasta que no se encuentre nada mejor.

Decir que la intención es trabajar en esta empresa hasta que no se encuentre nada mejor es menospreciar a la empresa y la oferta que ésta hace. Además, se hace patente, de entrada, un claro desajuste entre el propio perfil y los requisitos del puesto de trabajo, porque no se ajusta a las expectativas laborales del entrevistado/a.

4.3.4. Afirmar que puede desarrollarse cualquier tipo de trabajo.

Hacer esta afirmación denota un desconocimiento de los requisitos del puesto de trabajo que ofrece la organización, una falta de valoración de uno/a mismo/a o un menosprecio por el propio proceso de selección. Se supone que cada persona tiene un perfil que se ajusta más o menos a los requisitos de un puesto y que un proceso de selección tiene la misión de encontrar a la persona con el perfil que más se ajusta al puesto.

4.4.1. Superar el miedo.

Uno de los principales obstáculos que debe superarse en una entrevista de selección es el miedo a ser evaluado y la ansiedad y los nervios que eso comporta. Si se controlan estas emociones, ya se tiene mucho ganado porque son la principal causa de la sensación de fracaso en una entrevista.

4.4.2. Considerar la opción de comenzar desde abajo.

Una persona que tiene y deja claras las propias expectativas y los objetivos profesiones debe ser capaz, también, de considerar la opción de comenzar desde un nivel inferior para el que se está capacitado, siempre que la empresa deje claro que existe la posibilidad de crecer, que éste sólo es el punto de partida en la relación contractual.

4.4.3. La organización tiene tanta necesidad de cubrir el lugar vacante como el candidato/a de encontrar un trabajo.

No hay que perder la vista que, en un proceso de selección, tanta necesidad tiene la empresa de cubrir el lugar vacante como los candidatos y candidatas de encontrar un trabajo. La mejor respuesta a estas necesidades, tanto de la empresa como de las candidaturas es, en el caso de la empresa, encontrar el perfil que más se ajusta a los requisitos del puesto de trabajo por cubrir y, en el de la persona que busca trabajo, encontrar el trabajo que más se ajusta a su perfil profesional y a sus expectativas laborales.